Octubre es un mes muy especial para la Iglesia Católica. En este mes celebramos el Santo Rosario, la fiesta de Santa Teresa de Lisieux y el Domund.
El Domund (Domingo Mundial de las Misiones), se celebra en todo el mundo el penúltimo Domingo de Octubre, en ese día toda la Iglesia reza por la causa misionera, y se organiza una colecta para sostenerla.
A lo largo de los siglos, la actividad misionera de la Iglesia ha evolucionado. El primer Misionero fue el mismo Jesucristo, El Enviado del Padre, para traer al mundo la Buena Nueva. Luego Sus apóstoles, ellos con su trabajo de evangelización y con su vida entera, extendieron la vida y misión de Él por el mundo:
Llamó a los Doce y comenzó a enviarlos de dos en dos, dándoles poder sobre los espíritus malos. Les ordenó que no llevaran nada para el camino, fuera de un bastón: ni pan, ni morral, ni dinero; que llevaran calzado corriente y un solo manto. Y les decía: «Quédense en la primera casa en que les den alojamiento, hasta que se vayan de ese sitio. Y si en algún lugar no los reciben ni los escuchan, no se alejen de allí sin haber sacudido el polvo de sus pies: con esto darán testimonio contra ellos.» Fueron, pues, a predicar, invitando a la conversión. Expulsaban a muchos espíritus malos y sanaban a numerosos enfermos, ungiéndoles con aceite. Marcos 6: 7-13
La palabra ‘misión’ no adquirió el significado que le damos hoy (un envío a tierras lejanas para difundir la fe cristiana), hasta el siglo XVI.
Han sido numerosos los misioneros a lo largo de la historia, personas que fueron buscar a la gente que no conocía a Jesús. Ellos dieron testimonio con su vida del amor de Dios y fueron declarados santos. Algunos de ellos son:
Santa Teresa de Lisieux
Considerada la patrona de las misiones. Aunque nunca salió de su país o de su convento, ofreció su gran amor y su vida a Jesús, también sus acciones y sus sufrimientos por los pecadores y por los misioneros.
San Francisco Javier
Declarado Patrono Universal de las Misiones fue un sacerdote jesuita del siglo XVI que abrió el camino a un ejército de misioneros en la India, Oceanía, Japón y China, respetando la inculturación del Evangelio en las culturas orientales.
Santo Maximiliano María Kolbe
Fue un sacerdote Jesuita que cada vez que tenía la oportunidad hablaba de Jesús, cuando iba en el tren, o compraba algo, siempre dejaba algún mensaje a la persona que tenía al lado. Cuando vivía en el Oriente no dejó de publicar un periódico católico ni ante las amenazas de muerte.
Santa Elizabeth Ann Seton
Fue la primera originaria de Estados Unidos declarada santa. Ella fundó la primera comunidad religiosa femenina estadounidense, las Hermanas de la Caridad, y a su vez creó las bases de la educación católica en Estados Unidos.
Santa Teresa de Calcuta
Fundó las Misioneras de la Caridad y dedicó su misión al servicio de los llamados más pobres entre los pobres. Su labor humanitaria fue reconocida con diferentes premios internacionales.
La transformación de numerosas vidas se ha logrado gracias a la dedicación de quienes han asumido su llamado misionero, convirtiéndose en instrumentos de salvación. A pesar de haber transcurrido dos mil años y de contar con avances tecnológicos y de comunicación, aún hay muchas personas que no han recibido el mensaje de salvación.
Durante la celebración de este mes de las misiones, es fundamental tener en cuenta que todos hemos sido llamados por el mismo Jesús a ser misioneros y que ser uno, no implica necesariamente abandonar nuestra tierra para trasladarnos a lugares distantes. La misión puede llevarse a cabo en cualquier lugar y momento, donde Dios nos ha colocado. Debemos ser portadores alegres del Evangelio, tanto a través de nuestras palabras y testimonios, como también mediante nuestras oraciones por aquellos que aún no conocen el mensaje de Dios.
